Introducción a la I+D+i Una perspectiva documental
Introducción a la I+D+i Una perspectiva documental
La investigación científica es un proceso en cadena, en el cual se pretende, partiendo de los conocimientos científicos precedentes, conceptualizar la realidad, como el fin de obtener y formular, mediante la observación y la sistematización metódicas, representaciones intelectuales que sean expresión lo más exacta posible de la realidad y contribuyan en engrosar el acerbo teórico de las ciencias. Cualquier investigación incluye tres fases sucesivas:
• Documentación: investigación documental, lectura y fichas de trabajo.
• Investigación empírica: diseño, observación y obtención y tratamiento de los datos.
• Elaboración: sistematización del material, redacción y presentación formal.
La importancia estratégica de la investigación científica y tecnológica en el mundo actual se hizo evidente a partir de los años 60 del siglo XX. Debido al rápido crecimiento de los recursos en I+D, se empezaron a recoger datos estadísticos y fue necesario normalizar las definiciones y clasificaciones para disponer de información comparable entre instituciones y países. Entre otros organismos internacionales, la OCDE empezó a elaborar di-versos manuales metodológicos para medir y analizar las actividades científicas y tecno-lógicas. Actualmente estos manuales constituyen el punto de partida obligado para delimitar la recogida e interpretación de datos sobre I+D+I.
Según los expertos de la OCDE, el término I+D designa al mismo tiempo tres conceptos diferentes:
• Investigación básica: "trabajos experimentales o teóricos que se emprenden principalmente para obtener nuevos conocimientos acerca de los fundamentos de los fenómenos y hechos observables, sin pensar en darles ninguna aplicación o utilización determinada" (OCDE, 2003: 30).
• Investigación aplicada: "trabajos originales realizados para adquirir nuevos cono-cimientos; sin embargo, está dirigida fundamentalmente hacia un objetivo práctico específico" (OCDE, 2003: 30).
• Desarrollo experimental: "trabajos sistemáticos que aprovechan los conocimientos existentes obtenidos de la investigación y/o la experiencia práctica, y está dirigido en la producción de nuevos materiales, productos o dispositivos; en la puesta en marcha de nuevos procesos, sistemas y servicios, o en la mejora sustancial de los ya existentes" (OCDE, 2003: 30).
La I+D tiene que distinguirse claramente de un amplio conjunto de actividades que también tienen su fundamento en la ciencia y la técnica. Estas actividades "están muy relacionadas con la I+D, tanto a través de flujos de información como en lo relativo en funcionamiento, instituciones y personal; pero, en lo posible, no deberían tenerse en cuenta para la medición de la I+D" (OCDE, 2003: 30). Se trata de las siguientes actuaciones:
• Enseñanza y formación: existe una relación profunda entre el impulso científico y la formación de nuevos investigadores.
• Otras actividades científicas y tecnológicas afines: servicios de información y re-cogida de datos, estudios de viabilidad, ensayos y normalización, etc.
• Otras actividades industriales: producción y actividades técnicas relacionadas, además de acciones de innovación que no sean I+D.
• Administración y otras actividades de apoyo.
Con respecto a la innovación, la OCDE la define como el "conjunto de etapas científicas, tecnológicas, organizativas, financieras y comerciales, incluyendo las inversiones en nuevos conocimientos, que llevan o que intentan quitar a la implementación de productos y de procesos nuevos o mejorados. La I+D no es más que una de estas actividades" (OCDE, 2003: 17). Por lo tanto, incluye la adquisición de tecnología, la puesta a punto de maquinaria y herramientas, la ingeniería y el diseño industrial, el inicio de fabricación y comercialización de productos nuevos y mejorados, etc.
De todos modos, existen dificultades metodológicas considerables para fijar unos límites precisos entre I+D+I y las otras actuaciones científicas y tecnológicas. Por ejemplo, resulta complicado delimitar correctamente el desarrollo experimental de otras actividades de innovación. La confusión para diferenciar la I+D de otras actividades científicas y tecnológicas también pueden aparecer en el momento de marcar una frontera clara entre la docencia y la investigación en las universidades o cuando una institución desarrolla diversos tipos de actuaciones, sobre todo en sectores punteros (biotecnología, ingeniería aeroespacial, tecnologías de la información y de las comunicaciones –TIC–, nanotecnología, etc.)
También hay que fijar un criterio fiable con respecto a otras actuaciones de apoyo a la I+D. Por ejemplo, la OCDE considera que “la provisión de servicios bibliotecarios o informáticos, forman parte de la I+D propiamente dicha si se destinan exclusivamente a I+D. (…) El mismo razonamiento se aplica al caso de las actividades de gestión, administración y trabajos de oficina” (OCDE, 2003: 47).