¿Qué es el hidrógeno verde?
El Hidrógeno verde es el hidrógeno generado a partir de electricidad renovable, utilizando como materia prima el agua, mediante un proceso de electrólisis. Asimismo, el hidrógeno obtenido mediante el reformado del biogás o la conversión bioquímica de la biomasa, siempre que se cumplan los requisitos de sostenibilidad establecidos, tendrá carácter renovable. La electrólisis consiste en utilizar una corriente eléctrica para descomponer mediante electrodos la molécula del agua en oxígeno e hidrógeno.
Este tipo de hidrógeno se considera una fuente de energía clave para alcanzar la neutralidad climática y descarbonizar la economía.
Tipos de hidrógeno
- Hidrógeno gris: es el hidrógeno producido a partir de gas natural u otros hidrocarburos ligeros como metano o gases licuados de petróleo mediante procesos de reformado. Actualmente, el 99 % del hidrógeno consumido en España es de este tipo.
- Hidrógeno azul: se trata del hidrógeno obtenido de forma similar al hidrógeno gris, pero al que se le aplican técnicas de captura, uso y almacenamiento de carbono (CCUS: Carbon Capture, Utilization and Storage) lo que permite reducir hasta en un 95 % las emisiones de CO2 generadas durante el proceso.
- Hidrógeno amarillo: el amarillo es el hidrógeno generado a partir de electricidad procedente de la red primaria, utilizando como materia prima el agua, mediante un proceso de electrólisis.
- Hidrógeno rosa: el rosa es el hidrógeno generado a partir de electricidad procedente de energía nuclear, utilizando como materia prima el agua, mediante un proceso de electrólisis.
- Hidrógeno turquesa: se trata del hidrógeno generado a partir pirólisis de metano. En este proceso se genera carbono sólido, por lo que, a diferencia del hidrógeno azul, no es necesaria la captura del carbono resultante.
¿Cómo puede utilizarse le hidrógeno verde?
- Industria química: el hidrógeno es un componente esencial en la producción de amoníaco y metanol, productos químicos fundamentales en la fabricación de fertilizantes y plásticos. Tradicionalmente, la industria química ha dependido del hidrógeno gris, pero el hidrógeno verde ofrece una alternativa sin emisiones de carbono.
- Refinerías de petróleo: en las refinerías, el hidrógeno se usa para procesos de desulfuración, que eliminan el azufre del petróleo crudo para producir combustibles más limpios. El hidrógeno verde puede reemplazar al hidrógeno gris en estos procesos, reduciendo las emisiones de CO2 de las refinerías.
- Energía y calefacción: el hidrógeno verde puede ser utilizado en sistemas de cogeneración para producir simultáneamente electricidad y calor, mejorando la eficiencia energética y reduciendo las emisiones en comparación con los combustibles fósiles.
- Transporte: los vehículos con celdas de combustible de hidrógeno, como automóviles, autobuses y trenes, están comenzando a utilizar hidrógeno verde. Estos vehículos convierten el hidrógeno en electricidad para alimentar motores eléctricos, emitiendo solo agua como subproducto. Esto los convierte en una alternativa limpia a los vehículos con motores de combustión interna.